miércoles, 28 de noviembre de 2007

Después de Todo...

Recordar la calidez de tú piel y sentirla tan cerca de mi, me hace pensar en lo maravilloso que es querer, amar y estar con la persona indicada, es como esas historias hermosas en donde no hay mas que belleza y felicidad, en donde no dejas de pensar en todos aquellos momentos que te han brindado y en donde te has sentido amada como nunca. Creo que esa sensación persiste en mi, pero ya en el fondo de mi corazón y sólo a veces sale a la luz, pero no por algo de necesidad sino mas bien para recordar que fue verdad, que fue lo mejor, que fue y no será jamás. Es como esos remedios que te curan las heridas o las enfermedades y te hacen sentir mejor, pero sabes que aún así en tú sistema sigue esa enfermedad y aunque no se muestre a la luz, se oculta en la oscuridad, para volver a sorprenderte cuando menos te lo esperas o mejor dicho cuando estas indefensa.

Son tan extrañas las cosas que pasan cuando ya no sientes nada de lo que algunas vez creías era imposible dejar, de lo que muchas veces te sostuvo y alimento día tras día sin necesidad de querer otra cosa más que eso, eso que hoy ya no existe y que ya no se toca. Preferiría muchas veces quedarme en mis sueños en donde aún puedo sentir el roce de tú piel con el mio, en donde mi voz y la tuya se hacen una, en donde la verdad era nuestra alianza y nos convertía en complices de ese loco amor, que hoy como nunca se encuentran y que sólo parecen ser cuentos de hada, podría haberle jurado al mundo que sería permanente, que sería el único y el más llenador de todos, pero no son más que palabras y que hoy el viento y el tiempo se han encargado de borrar. Lo bueno es que la tristeza se ha quedado atrás y esas ganas insoportables de llorar ya no se sienten más, pero a veces el recuerdo trae un poco de melancolía, que muy bien sé que se puede pasar con un poco de aire y un toque leve de alegría, de todas formas arrebatador muchas veces se hace sentir tanto enredo dentro de uno, pero como adaptación a nuestra propia naturaleza hay que aceptarlo, al menos tan perdida del todo no me encuentro ni tampoco sola, pero ese vacío aún se encuentra ahí, esperando por alguien para que lo vuelva a llenar o simplemente intente completar un poco de el.

Es raro pensar cosas e imaginar muchas otras que en realidad son sólo sueños, sueños que marcan nuestra vida y que se quedan en nuestra mente como un suave desliz de entre las sombras, todo tiene un significado y así también un propósito, será de Dios que el propósito de aquello haya sido demostrarme que la vida sigue, aunque ya no se cuente con la persona que más falta te ha hecho o que simplemente no sigue contigo, será de Dios demostrarme que el amor no se busca, sino que llega a uno en el momento indicado y cuando menos uno lo espera, será de él y de mi destino hacerme sentir que valgo por lo que soy y aunque ya no tenga del todo amor hay quienes si me aman de corazón.

Nunca pensé que lo superaría de tal forma en donde hoy los buenos recuerdos me hacen feliz y a pesar de que ya no los pueda hacer realidad con esa persona, sé que puede venir otra y hacerme pasar por ellos nuevamente y quien sabe de una forma mejor, lo único que hay que hacer es pensar positivo y no negar el pasado sino hacerlo parte de tu vida, pero ya pasada.


En la Cima se encuentra mi Amor, tocando suavemente
mi corazón.