Aún te observo delimitadamente, tú cabello, tus ojos todo se me hace un anhelo que jamás volveré a tener, tú belleza que me impacta, tú sonrisa que me atrae, es como en primavera todo florece pero en mi se congela, se congela todo cada centímetro de mi ser, ya no se como tocar esa flor hermosa temo marchitarla, será que yo ya estoy marchita... A veces busco en mi memoria los recuerdos infinitos de nuestro amor pero no los encuentro me los han robado, se lo han llevado como todo en mi, no creo saber que paso, sólo te observo para averiguarlo. Estas tan cambiada que ni tú sonrisa parece la misma, me desespero no le hayo razón es como un laberinto sin salida, pero en realidad si la tiene y yo no la he buscado.
Te toco sutilmente a una distancia jamás tenida, te hablo sabiendo todo lo que digo como si una palabra derrumbara todo, tengo esa sensación de besarte, sí aún la conservo mas me las guardo, te ves tan distinta pero aún te amo, amo todo de ti simplemente me encantas... Llegada la noche no te tengo incluso te necesito, me pregunto qué ocurre qué esta pasando que nada es igual, no creo ser yo el cambio, pero siento que con todo esto no mantengo la misma posición, detendría el tiempo si fuera posible y me daría minutos y horas para saber qué sucede, sé que nada cambiará porque todo es tan real ya nada es una dulce fantasía, aún así guardo mis esperanzas esas hermosas esperanza de seguir juntas, pero tampoco me engaño y aunque llore a mares puede que ya nada vuelva a pasar...
Como amigas nos vemos como amigas nos hablamos incluso jugamos, no pienso mal de nada ni siquiera de ti, mi mente tan vacía y tan llena la vez se ha quedado estancada, sólo pasa agua como un río, este río interminable que no me ha dejado terminar de llorar.
Es un paisaje, es un cuadro una imagen, juntas pero distanciadas, solas y acompañadas, triste pero feliz, complicada y disgustada, a tú lado adelante y hacia atrás, a tú lado y tú sin mirar.
La Muerte Acaba Por Separar a los Amantes
